La leche también puede provocar malestar en los niños
Los niños suelen sufrir de sensibilidad a los alimentos, y esto incluye los lácteos. Al igual que en los adultos, puede haber diferentes causas, como la alergia a la leche o la intolerancia a la lactosa. Estas son algunas señales que deberías observar si te estás preguntando si un niño es sensible o no a los lácteos. La intolerancia a la lactosa en los niños puede ser más fácil de reconocer si conoces los síntomas:
Eructo en exceso
Gases en exceso
Diarrea
Dolor abdominal
Observa las reacciones de tu hijo
Quita los lácteos y vuelve a incorporarlos en la dieta de tu hijo, y toma nota de los resultados. ¿Puede tolerarlos un poquito, pero no mucho? ¿Cuánto es demasiado? Prueba con productos lácteos bajos en lactosa; por ejemplo, los quesos duros tienen menos lactosa que los quesos blandos.
Un profesional de la salud puede ayudarte a averiguar lo que puede estar causando los síntomas de intolerancia a la lactosa de tu hijo. En tu próxima visita al pediatra, habla sobre si tu hijo puede ser intolerante a la lactosa.
Recuerda que los niños tienen huesos en crecimiento
La leche contiene nutrientes importantes, como el calcio, que ayudan a los niños a desarrollarse mientras crecen. Si tu hijo es intolerante a la lactosa, igual puedes darle los deliciosos postres con lácteos que le encantan, y las vitaminas y minerales que necesita para tener huesos fuertes.